Qué son los engramas

Qué son los engramas

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Los engramas son un concepto que proviene de la neurociencia y la psicología, y se refiere a las huellas o registros físicos que quedan en el cerebro después de una experiencia. Son los rastros de memoria almacenados en las neuronas y en sus conexiones sinápticas, que se activan cuando recordamos un evento o experiencia pasada. En términos simples, un engrama es una representación física de una memoria en el cerebro.

1. Origen del Concepto

El término engrama fue propuesto por el neurocientífico alemán Richard Semon a principios del siglo XX. Semon planteó que cuando vivimos una experiencia, esta se «imprime» en el cerebro en forma de un engrama, un rastro físico que almacena los detalles de esa experiencia. La idea se adelantaba a su tiempo, y fue con el avance de la neurociencia que se ha comenzado a confirmar la existencia de estas huellas neuronales.

2. Cómo Funcionan los Engramas

Un engrama se forma a través de un proceso llamado plasticidad sináptica, que es la capacidad de las conexiones entre neuronas (sinapsis) para fortalecerse o debilitarse en función de la actividad neuronal. Cuando tenemos una experiencia, las neuronas involucradas en esa experiencia se activan y crean nuevas conexiones o refuerzan las ya existentes. Este proceso es la base de la memoria y el aprendizaje.

a) Codificación de la Experiencia

Cuando experimentamos algo nuevo, las neuronas que participan en la percepción y el procesamiento de esa experiencia se activan en patrones específicos. A medida que estas neuronas se activan repetidamente, los patrones de conexión entre ellas se fortalecen, formando el engrama que almacena la información sobre esa experiencia.

b) Consolidación

El engrama no se forma completamente en el momento de la experiencia. Después de que vivimos un evento, el cerebro sigue trabajando para consolidar esa memoria, un proceso que puede tardar horas o días. Durante el sueño, por ejemplo, las neuronas revisan y refuerzan los engramas, asegurándose de que las memorias importantes se almacenen de manera efectiva.

c) Recuperación

Cuando intentamos recordar una experiencia, se activan los mismos grupos de neuronas involucrados en la creación del engrama. Esto permite que revivamos o recordemos el evento. Cuanto más fuerte sea el engrama, más fácil será recordar esa memoria.

3. Engramas y la Memoria

Los engramas están estrechamente relacionados con la memoria a largo plazo, que es el almacenamiento duradero de información en el cerebro. Existen diferentes tipos de memorias que pueden ser almacenadas en forma de engramas, tales como:

  • Memorias episódicas: Relacionadas con eventos específicos y experiencias personales.
  • Memorias procedimentales: Que involucran habilidades y hábitos, como andar en bicicleta o escribir en un teclado.
  • Memorias emocionales: Asociadas a las emociones que acompañan una experiencia.

La consolidación y recuperación de engramas no siempre es perfecta. A veces, las memorias pueden distorsionarse o incluso desaparecer, lo que implica que los engramas no son fijos, sino dinámicos y susceptibles a cambios.

4. Engramas y Emociones

Las memorias asociadas con emociones intensas, ya sean positivas o negativas, suelen dejar engramas más profundos y duraderos. Por ejemplo, eventos traumáticos pueden crear engramas fuertes, lo que explica por qué los recuerdos de traumas o eventos muy emotivos pueden ser tan vívidos y persistentes. En algunas teorías, como la de L. Ron Hubbard en la Cienciología, se utiliza el término «engramas» para referirse a traumas emocionales del pasado que afectan el presente, aunque esta interpretación es diferente a la definición neurocientífica del término.

5. Engramas y el Aprendizaje

El aprendizaje está directamente vinculado a la formación de engramas. Cada vez que aprendemos algo nuevo, se forman nuevos engramas o se modifican los existentes. La repetición y la práctica son claves para consolidar los engramas y, por lo tanto, para aprender y recordar nuevas habilidades o información.

6. Investigación sobre Engramas

En las últimas décadas, los avances en neurociencia han permitido a los científicos estudiar los engramas de manera más directa. Mediante técnicas como la optogenética (el uso de la luz para controlar las neuronas), los investigadores han sido capaces de identificar, manipular y hasta borrar engramas específicos en modelos animales como los ratones.

Algunos experimentos han demostrado que es posible reactivar un engrama en el cerebro de un ratón para inducir la recuperación de una memoria específica. En otros casos, los científicos han conseguido borrar recuerdos traumáticos eliminando los engramas relacionados. Esto abre la puerta a investigaciones sobre tratamientos para trastornos como el trastorno de estrés postraumático (TEPT), en los que los engramas de eventos traumáticos continúan afectando a la persona.

7. Importancia de los Engramas en el Crecimiento Personal

En el contexto del crecimiento personal, los engramas juegan un papel importante porque muchas de nuestras respuestas automáticas y creencias están basadas en memorias subconscientes almacenadas en forma de engramas. Cambiar patrones de pensamiento y creencias limitantes implica, en cierto modo, la reprogramación de engramas o la creación de nuevos engramas más positivos.

Mediante técnicas como la visualización, la meditación o el autocontrol consciente, se puede trabajar para formar nuevos engramas que refuercen patrones de comportamiento más saludables y positivos. Rafael Pastor, en su trabajo con el crecimiento interior, seguramente se enfoca en técnicas que ayudan a transformar estos engramas limitantes en patrones de crecimiento y desarrollo personal.

8. Conclusión

Los engramas son la base física de nuestras memorias y aprendizajes. Aunque son invisibles, su influencia en nuestra vida diaria es enorme. Están profundamente arraigados en el funcionamiento del cerebro, y cada experiencia que vivimos deja una huella en forma de engrama. Aprender a trabajar con estas huellas, ya sea para reforzar memorias positivas o cambiar patrones limitantes, es clave para el desarrollo personal y el bienestar mental.

En la psicología y la neurociencia, el término «engramas» se refiere a las huellas o registros neurofisiológicos que se forman en el cerebro como resultado de la experiencia. Se cree que los engramas son las representaciones físicas de los recuerdos y las experiencias vividas. Los engramas son memorias dolorosas almacenadas en el subconsciente que afectan negativamente nuestra vida presente.

Cuando una persona está débil, agotada, intoxicada, asustada, con emociones de culpabilidad, desmayada, inconsciente, etc. se graban las circunstancias que se perciben como momentos engrámicos en la mente reactiva. Lo que esté pensando, sintiendo, oyendo, viendo, etc. se convierte en ordenes engrámicos o mandatos que se repiten a menudo. Cuando el subconsciente percibe percépticos similares, o sea que es una situación que le recuerda al momento engrámico que grabo, trastorna el cuerpo y la mente a sus programas grabados en el subconsciente. En la P.N.L. se le llaman anclas y este es el campo de batalla de los terapeutas holísticos.

Los engramas se forman a través de la repetición y la intensidad de las experiencias. Cuando vivimos una experiencia significativa o traumática, se producen cambios a nivel neuronal y se establecen conexiones entre las células cerebrales. Estas conexiones neuronales forman los engramas, que son las redes de circuitos neuronales que almacenan la información de la experiencia.

Los engramas pueden influir en nuestra forma de pensar, sentir y actuar, ya que determinan cómo interpretamos y respondemos a determinadas situaciones. Pueden ser positivos, como en el caso de los recuerdos felices y gratificantes, o negativos, como en el caso de los recuerdos traumáticos o dolorosos.

La terapia y las prácticas de cambio personal, como la programación neurolingüística (PNL) y la hipnosis, a menudo se centran en identificar y reprogramar los engramas negativos para liberar patrones limitantes y promover el crecimiento personal y el bienestar emocional.

Es importante tener en cuenta que la noción de engramas es una teoría y un concepto en desarrollo en el campo de la neurociencia y la psicología, y aún se están realizando investigaciones para comprender mejor su naturaleza y funcionamiento.

El procesamiento de los engramas puede implicar diferentes enfoques y técnicas dependiendo del enfoque terapéutico o de cambio personal que se esté utilizando. Aquí hay algunas estrategias generales que se pueden considerar:

  1. Toma de conciencia: El primer paso para procesar los engramas es tomar conciencia de ellos. Esto implica reconocer y identificar los patrones de pensamiento, emociones o comportamientos que están asociados con experiencias pasadas y que pueden estar limitando tu bienestar en el presente.
  2. Exploración emocional: Una vez que has identificado los engramas, es importante explorar y comprender las emociones asociadas con ellos. Esto implica permitirte sentir y expresar las emociones de manera segura y saludable, ya sea a través de la escritura, la terapia verbal o técnicas de liberación emocional.
  3. Reevaluación de creencias: Los engramas a menudo están vinculados a creencias limitantes sobre uno mismo o el mundo. Es importante cuestionar y reevaluar esas creencias para desafiar su validez y sustituirlas por creencias más positivas y empoderadoras.
  4. Técnicas terapéuticas: Existen diversas técnicas terapéuticas que pueden ser útiles para procesar engramas, como la terapia de reestructuración cognitiva, la terapia de exposición, la terapia de desensibilización y reprocesamiento por movimientos oculares (EMDR), la terapia de liberación emocional (EFT) y la programación neurolingüística (PNL), entre otras.
  5. Autocuidado y prácticas de autocuración: Además de trabajar con un profesional, puedes apoyar el procesamiento de los engramas a través de prácticas de autocuidado y autocuración, como la meditación, la respiración consciente, la visualización creativa, el ejercicio regular, el descanso adecuado, la nutrición equilibrada y el mantenimiento de relaciones saludables.

Recuerda que procesar los engramas puede ser un proceso gradual y personalizado. Si sientes que los engramas están afectando significativamente tu bienestar, es recomendable buscar el apoyo de un profesional de la salud mental o un terapeuta especializado en técnicas de cambio personal para que te guíe en este proceso.

Hay personas que sienten y perciben los engramas con facilidad, e incluso de vidas pasadas. Puede ser que todos tengamos esta habilidad, pero por falta del conocimiento perdido sobre los engramas no la practiquemos y entendamos.

Unas preguntas que uno se puede hacer es ¿desde dónde estoy haciendo lo que estoy haciendo? ¿Por qué estoy sintiendo esto? ¿de dónde viene lo que me está pasando?, etc. Aprovecha para recibir una respuesta de tu Ser Superior y procesar un poco esa memoria, para que cada vez te afecte menos. Se trata de sacarla del nivel subconsciente o reactivo y llevarlo a la mente consciente o analítica. Todos a lo largo de las reencarnaciones hemos tenido momentos difíciles que se han grabado en nuestro cuerpo emocional o cuerpo causal como experiencias. Estas vuelven a aparecer en las siguientes reencarnaciones hasta que las proceses como eventos conscientes.